Los sueños sí se cumplen. Solo hay que ver lo que ha hecho el BeSoccer CD UMA Antequera en la Copa del Rey de Jaén 2022. Con humildad e ilusión ha llegado hasta la cima de esta competición y Miguel Conde, como capitán, alzó el trofeo al cielo del Olivo Arena de Jaén. Un momento irrepetible. Algo único. El deporte también tiene estas cosas y, en especial, el fútbol sala. Un grupo de guerreros universitarios ha salido durante dos días a disfrutar en la pista, a competir como solo ellos saben hacer y convirtiendo un excelso trabajo defensivo en el mejor ataque. Primero partió del camino al título, en semifinales, a Industrias Santa Coloma y en la gran final al Viña Albali Valdepeñas. Un durísimo adversario que estuvo respaldado por una afición espectacular. La épica de cada jugada, el cariño y apoyo de esos seguidores que estuvieron en las gradas, el sufrimiento de saber que había que minimizar errores y ser lo más eficaces posibles. Todo esto ocurrió en un choque que tuvo todo, pero lo más importante, el desenlace premió a esa escuadra de Segunda División que lucha por regresar a la élite nacional.

El camino a la final de la Copa ha sido espectacular. Cinco conjuntos de Primera División, Burela, Zaragoza, Aspil, Santa Coloma y Valdepeñas, han sucumbido ante la fe, el coraje y la raza competitiva de la formación dirigida de forma magistral por José Antonio Borrego “Tete” y todos los miembros de su cuerpo técnico. El guión de partido del domingo tuvo algún símil con el del sábado. Hubo que remontar un gol inicial del rival. Lazarevic, en el minuto 6, abrió la cuenta goleadora en un lanzamiento potente de falta (0-1). Conejo se lanzó a detener el disparo. El balón le pasó entre las piernas. Un duro golpe, como en la semifinal, pero el equipo volvió a reponerse y el paso de los minutos fue su mejor aliado para asentarse en el encuentro y crecer desde un encomiable trabajo defensivo.

Miguel Conde se encargó de establecer la igualdad en el marcador culminando un contraataque en el que Pablo le colocó el balón en ventaja para que solo tuviera que dirigirlo al fondo de las mallas (1-1). Sin tiempo para disfrutar demasiado el tanto, el plantel verde volvió a emerger sobre el 40x20 y David Velasco aprovechó un balón suelto en el área y subió el 2-1 al marcador. Difícil sí, imposible no. Con ese pensamiento, los jugadores vestidos de verde se iban multiplicando. Uno ayudaba a otro y, entre todos, iban haciéndose cada vez más fuertes para frenar el inmenso potencial de Viña Albali Valdepeñas. David Ramos utilizó todos los recursos disponibles tratando de dar un cambio de rumbo al choque. En el otro banquillo, el tándem, Tete y Crispi, cuidaron al máximo el esfuerzo de los 7 disponibles para jugar junto a los dos chicos del filial convocados; Javi Campano y Jesús Sepúlveda. Dani Ramos no pudo participar en la final por una lesión muscular, aunque sí lo hizo en la semifinal del día anterior.

La primera parte entró en su recta final y emergió la figura de Burrito. El ala malagueño sacó a relucir su talento y se lo pasó en grande con el balón en los pies. Le dio al equipo seguridad, desborde y una respuesta de lo más fiable en situaciones exigente. En el minuto 18, el 2 avanzó pegado a la línea de banda, dejó tumbado en la cancha a su defensor y superó al portero con una sutil vaselina. El balón se estrelló en el poste y Óscar apareció raudo y veloz para fusilar la red. Un resultado de 3-1 al descanso y la sensación de que la victoria era posible sabiendo, también, que en el segundo tiempo habría momentos complicados que gestionar. Así fue. El cuadro azulón, en la final le tocó lucir una camiseta amarilla, dispuso de sus ocasiones. El mayor obstáculo lo encontraron bajo palos. Conejo estuvo sensacional.

Aguantó y resistió en defensa la escuadra antequerana sin renunciar a realizar sus ofensivas. Un taconazo de Cobarro, un tiro cruzado de Burrito, Óscar se quedó cerca de volver a batir a Edu y Pablo actuó como ese referente en el puesto de pívot y generó mucho peligro. El tiempo se agotaba y emergió una esperanza para Valdepeñas con un tanto de Humberto a 6 minutos de la conclusión. David Ramos recurrió al portero-jugador sin poder romper el sistema defensivo colocado por Tete. El 3-2 no se movió, el triunfo se lo quedó el BeSoccer CD UMA Antequera y empezó a sucederse instantes para el recuerdo. La celebración con la afición, las lágrimas de emoción de jugadores y cuerpo técnico sin olvidar felicitar al oponente de forma deportiva. El broche de oro lo puso el capitán Miguel Conde subiendo al palco por la Copa del Rey y levantándola, en primer lugar, junto a las autoridades presentes en el palo. Luego se bajó a la pista y comenzó la celebración de una auténtica e histórica gesta deportiva. 

BeSoccer CD UMA Antequera: Conejo (P), Alvarito, Óscar, Burrito y Cobarro. También jugaron: Alberto Morillo Contreras “Yiyo” (P), Miguel ©, David Velasco, Dani Ramos, Pablo, Javi Campano y Jesús Sepúlveda.

Viña Albali Valdepeñas: Edu (P), Lemine, Lolo, Ivi y Sergio González. También jugaron: Óscar de la Faya (P), Geraghty, Humberto, Matheus Pera, Bateria, Rafa Rato ©, Lazarevic, Nano, Gabriel Ribeiro, Adrián García y Pablo Molina.

Goles: 0-1 Lazarevic (6’), 1-1 Miguel (8’), 2-1 David Velasco (9’), 3-1 Óscar (18’) y 3-2 Humberto (34’).

Árbitros: Alberto Sarabia y David Urdánoz. Amonestaron a Conejo en los locales y a Edu, Lazarevic, Lolo, Rafa Rato y Matheus Prea en los visitantes.

Olivo Arena de Jaén.